Por: Bianca Sigrid Corona Martín
Por encargo del Ministerio Federal Alemán de Medio Ambiente, Conservación de la Naturaleza y Seguridad Nuclear (BMU por sus siglas en alemán) y en el marco de la iniciativa Internacional de Protección del Clima (IKI) la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH (Cooperación Alemana al Desarrollo Sustentable) implementa el programa “Empresas de Agua y Saneamiento para Mitigación del Cambio Climático” (WaCCliM) en coordinación directa con la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), el cual tiene como objetivos principales incrementar la eficiencia energética de las Empresas de Agua y Saneamiento influyendo a lo largo de todo el ciclo urbano del agua, crear un sector de agua y saneamiento resiliente y bajo en carbono, impulsar la transversalización del enfoque de mitigación y adaptación al cambio climático en el sector y mejorar el nivel de ambición para el cumplimiento de las Contribuciones Determinadas a nivel Nacional (NDC) El cambio climático es un problema global con impactos locales. La aceleración en la generación de emisiones de gases de efecto invernadero aumenta la temperatura de la superficie de la Tierra, las consecuencias de esto incluyen el aumento del nivel del mar, el cambio de los patrones de lluvia, la escasez de agua, las inundaciones más frecuentes e intensas y la erosión de la tierra. Estos impactos del cambio climático son una amenaza para el suministro de agua potable en calidad y cantidad, para la vida humana, las viviendas, las cosechas, la producción y los ecosistemas. Para garantizar un suministro de agua adecuado en un futuro incierto, el sector del agua tiene que encontrar soluciones para adaptarse a los riesgos que conlleva el cambio climático.
Al mismo tiempo, el suministro de agua potable y el tratamiento de las aguas residuales también contribuyen a las emisiones de gases de efecto invernadero. Los sistemas de suministro de agua potable y tratamiento de aguas residuales consumen mucha energía (hasta un 40% de la energía municipal) y esta energía suele proceder de la quema de combustibles fósiles (emisiones indirectas de GEI). Las pérdidas y fugas de agua provocan un consumo de energía aún mayor, y las aguas residuales no tratadas o mal tratadas emiten metano y óxido nitroso (emisiones directas de GEI), gases con un potencial de calentamiento global muy superior al del dióxido de carbono.
La visión del programa WaCCliM se centra en un sector urbano del agua sostenible y climáticamente inteligente a multi escala (local, nacional y global). Para alcanzar esta visión, WaCCliM apoya a las empresas de agua y saneamiento para reducir su huella de carbono y adaptarse a los impactos del cambio climático en los países México, Perú y Jordania. Esto mediante un enfoque intersectorial que considera las implicaciones de los gases de efecto invernadero (GEI) en el nexo agua-energía-carbono.
WaCCliM pone a disposición de las empresas de servicios de agua y saneamiento una hoja de ruta para lograr la neutralidad de carbono y la resiliencia a los riesgos climáticos. Esta hoja de ruta consta de cinco pasos: 1) Hacer que los socios nacionales y locales comprendan la necesidad de descarbonizar el sector agua y saneamiento 2) Gestión y recolección de datos, evaluación de la generación de gases de efecto invernadero y el rendimiento energético 3) Planificación integrada para obtener las mejores oportunidades de reducción de GEI teniendo en cuenta todo el ciclo urbano del agua 4) Seleccionar las medidas viables y asegurar la financiación para su aplicación 5) Monitorear el desempeño y verificar la reducción de emisiones de GEI.
Existen diversas oportunidades para mejorar el balance de carbono de las empresas de agua y saneamiento, a través de las lecciones aprendidas y las experiencias de trabajo con diferentes empresas de agua y saneamiento en los países socios de WaCCliM destacan las siguientes oportunidades: la actualización de equipos con tecnologías más eficientes desde el punto de vista energético (eficiencia energética), la reducción de pérdidas de agua en las redes de distribución en general y la gestión de la presión en particular (eficiencia hídrica), la captación del metano para la generación de energía y reducir la liberación de GEI a la atmósfera, lo que conlleva a un aumento en la seguridad energética y mejorar la calidad del medio ambiente (cogeneración) y la recuperación de nutrientes (fósforo y nitrógeno) mediante la reutilización del agua residual tratada para la agricultura. Las empresas de agua y saneamiento no solo contribuyen a la generación de GEI y al cambio climático, también se enfrentan y se ven vulnerables frente a sus efectos, en este sentido, el desarrollo de un plan de riesgos climáticos se identifica como una medida para enfrentar y minimizar los riesgos a los que están expuestas sus infraestructuras (reducir vulnerabilidad) y al combinarlo con medidas de reducción de GEI pueden lograr un impacto más significativo a la adaptación y mitigación del cambio climático.
Cómo coadyuvante a la hoja de ruta para la descarbonización del sector urbano del agua, surge la Herramienta de Evaluación y Monitoreo del Desempeño Energético y las Emisiones de Carbono (ECAM por sus siglas en inglés), la cual se considera una pieza clave dentro de la hoja de ruta para promover un sector urbano del agua sostenible y climáticamente inteligente. ECAM es una herramienta gratuita y disponible en línea que ofrece capacidades únicas para evaluar las emisiones de gases de efecto invernadero y el consumo de energía de los sistemas de agua y saneamiento teniendo en cuenta todos los componentes del ciclo urbano del agua, desde el suministro de agua hasta el tratamiento de las aguas residuales, la gestión de los lodos y la reutilización del agua. La herramienta ECAM busca brindar mayores conocimientos al identificar las áreas potenciales para reducir las emisiones de GEI, aumentar el ahorro de energía y mejorar la eficiencia general al reducir los costos por pago de electricidad.
El estandarizar la contabilización de las emisiones de gases de efecto invernadero del ciclo urbano del agua puede ayudar a las instituciones responsables de la toma de decisiones en los países a desarrollar políticas y estrategias eficaces para reducir las emisiones de GEI de forma holística. A la par, la integración de las agendas del agua y del clima presenta oportunidades para desbloquear el acceso al financiamiento climático para las empresas de servicios de agua y saneamiento que trabajan de la mano con sus ciudades y municipios.
Durante los próximos años (2013-2022) WaCCliM continuará trabajando e impulsando actividades que contribuyan a la adaptación y mitigación del cambio climático dentro del sector urbano del agua considerando el ciclo del agua desde un enfoque holístico. Para mayores informaciones les invitamos a visitar el sitio https://wacclim.org/about/
